Por Pbro. Richard Cortese, Responsable del MSM en Estados Unidos de América
(English)
Noviembre 1, 2019
Solemnidad de Todos los Santos
Queridos hermanos y hermanas del MSM,
Nuestra Señora en Sus mensajes al P. Gobbi enfatiza
repetidamente que debemos orar y ser fieles al Santo Padre, el Papa. Me
gustaría apoyar esto con firmeza. Debemos, como Ella nos ha dicho, orar mucho
por él, amarlo y apoyarlo.
Muchos hoy parecen decir: “No entiendo al Papa. No
sé lo que está haciendo.” Y, estoy de acuerdo, que a veces parece que no
entendemos todo. Pero, debemos ser fieles y orar, y no perder nuestra paz de
corazón. Recuerde que Nuestra Señora ha dicho en su último mensaje del 31 de
diciembre de 1997, # 604, “Todo les ha sido revelado”. Es importante
ser como niños sencillos y confiar en Nuestra Señora.
Seguro nuestro
Señor, como el Buen Pastor, y Nuestra Señora que nos dice que estos son Sus
tiempos, saben exactamente lo que está sucediendo. Quizás es como si
estuviéramos siendo probados. Los medios de comunicación sociales escriben cualquier
cosa que les agrada. Hay quienes están dentro de la Iglesia, como nos dice
Nuestra Señora, que están más dispuestos a escuchar al Maligno que a Dios o la
Iglesia. El resultado es polarización, confusión, gran emoción y la sensación
de que la Iglesia está siendo destrozada.
En uno de Sus primeros
mensajes, Nuestra Señora nos dice que la Iglesia mantendrá su forma tradicional.
No será cambiada. En Sus mensajes, Ella nos da la esperanza al compartir, desde
Su Inmaculado Corazón, un conjunto tradicional de enseñanzas y valores
católicos. En un mensaje, Ella nos pide que leamos el “Credo del Papa
San Pablo VI“. Es un resumen encantador de todas las enseñanzas de
nuestra fe católica que fue escrito en un momento en que parecía que todo se
estaba desmoronando y cuando la disidencia buscaba entrar en todas las partes
de la vida de la Iglesia. Recuerdo esos días. ¡Eran tiempos difíciles, pero
Nuestra Señora estaba con nosotros!
En otro de
Sus mensajes, Ella mencionó el Catecismo de la Iglesia Católica. Es un
magnífico resumen de las enseñanzas de la Iglesia. Encarna las enseñanzas del
Concilio Vaticano II y la Sagrada Tradición de la Iglesia.
El amor de Nuestra Señora por el
Papa en Sus mensajes es inequívocamente claro. Sigamos Su ejemplo amando,
apoyando y orando con Ella al Papa Francisco, no solo en nuestros Cenáculos
sino también en todo lo que hacemos. Nuestra Señora nos dice que llegará un día
en que solo quedará un pequeño resto para apoyar al Papa, pero que con este resto
ocurrirá el Triunfo de su Inmaculado Corazón. Tengamos mucho cuidado de no
dejar que tantas noticias falsas, o medias verdades, o informes espectaculares
nos alejen de los mensajes amorosos de Nuestra Señora para el primero de Sus
Hijos, el Papa.
El hecho es que el Sínodo de la
Amazonia es un sínodo consultivo para el Papa. Todo lo que se ha dicho o
escrito en el sínodo no tiene validez hasta que el Papa mismo escriba su
Exhortación Apostólica post-sinodal. Esto puede tomar desde unos pocos meses
hasta un año. Depende del Papa escribir lo que desea escribir. En ese momento
sabremos lo que el Papa piensa y desea decir a la Iglesia. Todo lo demás en
vigor hasta entonces podría considerarse como mucho humo y palabrería. Incluso
el documento de trabajo no es un documento definitivo. Éste puede cambiar mucho
cuando el Papa decida al respecto, qué hacer y qué decir en su Exhortación Apostólica
final.
Nuestra Señora repetidamente nos
dice que estemos alegres, que no nos preocupemos y que estemos en paz. Este
también es mi consejo. El tiempo y la paciencia nos revelarán cosas, cómo se
desarrollará Su plan de paz y salvación para tantas almas. Prefiero dejar que
Nuestra Señora nos guíe en esto, mientras rezamos en silencio y La escuchamos,
y no a esas voces de ansiedad, preocupación, división, desastre o incluso
profecía.
Gracias por tomarse el tiempo de leer esto.
Animémonos unos a otros, busquemos ser pacientes y tranquilos, y amarnos unos a
otros. Y continuemos difundiendo los Cenáculos, especialmente en las familias.
Me gustaría animar a los Cenáculos entre los hermanos sacerdotes. ¿Qué tan
poderoso es un cenáculo? ¿Cuán poderoso es el Inmaculado Corazón de María? Yo
diría que es lo suficientemente poderoso como para aplastar la cabeza de
Satanás, y para ayudar a salvar una multitud de almas, y para ayudarnos a
apoyar y orar por el Papa. Nuestra Señora nos ha dicho que es
“omnipotencia suplicante” (7 octubre 1983, cf. 275k). ¡Pongamos
nuestro énfasis en esto!